Sunday, 02 de June de 2024

Opinión y fundamento

Miércoles, 24 Octubre 2012 22:55
Matego C´mon

Todo depende del cristal con que se mira

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.Traidor, vendido, mentiroso, dos caras, etc…son los múltiples adjetivos que hoy leía en cierta nota publicada criticando al ex vocero del movimiento #YOSOY132 que ya labora como comentarista en un programa de análisis en Foro Tv (Televisa).

Antonio Attolini no explica de manera tangible (al menos para mí) el por qué decidió formar parte de lo que en meses pasados consideraba y fuertemente criticaba como el principal factor de domino sobre la información que sesgadamente transmitía a los ciudadanos el voto determinado hacia un solo candidato, Enrique Peña Nieto.

La lucha que encaminó el movimiento, sus líderes y Attolini, después de las elecciones, evidenció un severo desgaste e inestabilidad en sus cimientos, dimes y diretes dentro de las estructuras dividían la causa y poco a poco fueron saliendo los múltiples intereses que en algún momento (aun sigo pensando en qué momento) supuestamente fueron “uno solo” demostrando lo coyuntural en su actuación contestataria así como la resistencia que al final, como muchos otros pseudo movimientos, el discurso sobre las acciones imperó.

Y es que pareciera maldición, pero en el México contemporáneo, independientemente del movimiento estudiantil de 1868 y el Movimiento Zapatista con el EZLN, toda congregación con un gran número de personas haciéndose llamar movimiento social, tiende siempre a disolverse con el tiempo aun cuando ni si quiera fuerza adquirió.

De esta manera, para que un movimiento social impere, requiere un significado, un fundamento y un objetivo: el significado, la acción y reacción contestataria, la resistencia, la oposición, la búsqueda de oportunidades y filtros ante un orden y estricto control aparente; fundamento, los múltiples discursos y proyectos con los que se estructuran dichas reacciones para finalmente llegar al objetivo, la democratización, reconocimiento, libertad y oportunidades para que las minorías o las mayorías adquieran protagonismo incluyente en el escenario social, político, económico e inclusive internacional.

Aunque esto será fuertemente determinado por la visión con la que se proyectan estos movimientos, el proyecto cultural, que Alain Touraine expresa en su explicación del concepto Movimiento Social, siempre será determinado por el enfoque y percepción con el que se aborda el problema o fenómeno, así, el proyecto cultural representará la propuesta, la necesidad por la que se “lucha”, el resultado y búsqueda aunado con las acciones que se toman para “lograrlo” pero siempre involucrando la abstracción de la realidad de un grupo en específico, por lo tanto, determinada.

 

Con esto no pretendo desmeritar la lucha y el sentido de dichos “movimientos”, finalmente son evaluados por la fuerza contestataria que generan o han generado, así como los cambios que surgieron después de su protagonización y los espacios así como las fragmentaciones que generaron.

Por lo tanto, Antonio Attolini es una muestra más de la visión individualizada y limitada con la que pretender formar parte de otra visión “generalizada” de lo que se hace llamar un Movimiento Social (#YOSOY132) contradice el “proyecto cultural” que el movimiento presentó y donde supuestamente sus integrantes y líderes defendían aunque desde el principio era evidente el carácter oportunista de gente como Attolini cuando al ser entrevistado y cuestionado respondía tendenciosamente hacia proyectos cortoplacistas “inteligentemente” (a veces lo dudo) maquilados para seguir con el discurso que en ese momento tenía que ser fuerte.

Ahora cada quien ve por sus propios intereses y observan el “movimiento” desde ángulos diferentes, por lo tanto la resistencia que ahora representan dependerá del cristal con el que se mira.