De los ocho mil indígenas registrados en el estado, mil se encuentran presos en las cárceles del estado, informó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) al tiempo de considerar urgente garantizar el acceso de este grupo vulnerable a un sistema eficaz de procuración de justicia.

A través de un comunicado, el organismo que preside Raúl Plascencia, señaló que es indispensable que las autoridades estatales se comprometan a contar con personal especializado en la atención de los problemas de ese sector, pues en su mayoría desconoce la razón por la que está sometido a proceso y privado de su libertad.

En Puebla el primer visitador general de la Comisión de Derechos Humanos del Estado, Omar Martínez Báez, aseguró que están en permanente revisión de los casos de indígenas en los 22 penales del estado.

“Estamos pendientes respecto de su estancia, de los procesos de detención pero cuando no se encuentran fuera de nuestra competencia, como corresponde a la autoridad judicial”, dijo recordando el caso de Atla, donde dos indígenas estuvieron presos por más de dos años.

Añadió que tienen mil 100 indígenas presos en el estado y que de todos se revisas su expediente, aunque evitó señalar si tienen personal que hable varios dialectos para atender los casos.

Y es que el comunicado señaló que las violaciones por lo general son porque ese sector no recibe asesoría jurídica inmediata y carece de intérpretes, traductores o de defensores públicos especializados, lo cual se agrava al ser víctimas de detenciones arbitrarias o maltrato.