Sara Márquez Romero, presidenta de Casa de Amor para Niños con Cáncer, denunció que durante los últimos cinco años, que coinciden con la administración del ex gobernador del estado, Javier Duarte, 30 niños fallecieron a causa del cáncer.
El día de ayer, el actual mandatario de la entidad, Miguel Ángel Yunes, reveló que durante el gobierno del ahora prófugo de la justicia, menores de edad que padecían diferentes tipos de metástatasis, recibieron quimioterapias falsas, pues les fueron suministradas dosis de agua destilada en lugar de los medicamentos para atender el padecimiento.
Luego de que se diera a conocer dicha información, la presidenta de Casa de Amor para Niños con Cáncer, condenó el hecho y exigió justicia al considerar que se trató de “un atentado a la vida de todos aquéllos que desafortunadamente padecen esta enfermedad”.
Sobre la posible relación entre las muertes de los menores y la aplicación indiscriminada del agua destilada, la activista expuso que los pequeños tenían alta probabilidad de salir adelante, por lo cual no descartó ningún vínculo entre ambos factores.
“No es posible que les haya dado agua destilada en las quimioterapias de los niños con cáncer”, recriminó.
“No se vale jugar con la vida de los propios, para mí es un acto criminal porque cuando a un hijo se le detecta esta enfermedad es una situación tan difícil que se vive como para el niño como para la madre o padre que la acompaña”, reclamó Márquez Romero.