En una misa de cuerpo presente, familiares y amigos dieron el último adiós a los fallecidos en la explosión ocurrida en el municipio de San Isidro Chilchotla
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La ceremonia se llevó a cabo entre lágrimas, música de mariachi y danzas regionales, después, los cuerpos fueron llevados al panteón habilitado por el gobierno estatal, en la parte más alta de la comunidad.
Los cuerpos fueron recibidos desde el martes por la noche, y fueron velados hasta la mañana siguiente frente a la parroquia de San Pedro. Sólo dos cuerpos fueron llevados a la comunidad de San Antonio, de donde eran originarios.
Los cuerpos de seis niños fueron llevados a la primaria “Benito Juárez”, y ahí el director y maestros rindieron un homenaje con un minuto de aplausos. Al final les pasaron lista por última vez.
Toda la comunidad estuvo presente en la ceremonia.
Con información de El Sol de Puebla.