El comercio ambulante está desbordado en el Centro Histórico en este cierre de año y mientras el corredor comercial autorizado sobre la 12 Poniente-Oriente luce casi vacío, calles como 3 y 5 Norte, 8 y 10 Poniente, están invadidas por puestos semifijos que venden ropa o fayuca, cuetes o pirotecnia además de armas blancas como cuchillos y pistolas de diábolos.
Los informales justifican su presencia por las bajas ventas a causa del temblor del pasado 19 de septiembre donde la restricción del paso del transporte público, provoca que sea mínima la presencia de clientes.
Conforme al recorrido por El Sol de Puebla, se puede observar cierta movilidad peatonal en este punto de la ciudad producto de la propia naturaleza de la época del año, pero eso significa igualmente mayor presencia de ambulantes.
El llamado corredor comercial puesto en marcha en junio de este 2017 con la finalidad de reubicar a los vendedores dando hasta 303 espacios que podrían llegar a 900 en tres turnos durante el día, luce casi vacío con presencia de puestos solamente sobre la 12 Poniente-Oriente con su intersección de la calle 5 de Mayo.
Aunque el informe del 13 de noviembre de la Dirección de Desarrollo Político municipal establecía la presencia de 85 puestos instalados, actualmente ese número de redujo a una cuarta parte de acuerdo al recorrido realizado poco después del mediodía.
Puestos de comida y de ropa, principalmente rodean este punto de la ciudad donde los ambulantes han mostrado su desacuerdo a este proceso de reubicación y que se vino a agudizar a raíz del temblor del pasado 19 de septiembre, donde la autoridad había registrado 169 espacios ocupados.
La presencia de este grupo se tiende a agudizar en las calles laterales como la 3 y 5 Norte, donde el paso vehicular se dificulta principalmente para dar vuelta a la 3 Norte sobre la 12 Poniente debido a la presencia de puestos en la esquina.
VENDEN PIRATERIA, COHETES Y HASTA ARMAS
La invasión de calles prohibidas para la venta informal se puede observar también en la esquina de la 6 Oriente y 5 de Mayo donde se vende fayuca o ropa clonada: bolsos, cinturones de reconocidas marcas internacionales, además de perfumes y ropa, forman parte de la variedad que se mezclan con la variedad de artículos para celulares como cargadores, micas y protectores.
En las esquinas de la 8 y 10 Poniente la situación no varía demasiado aunque prolifera más accesorios para telefonía móvil y puestos de antojitos como chalupas, nieves, tacos de canasta y tacos dorados.
Si usted quiere celebrar con algo de ruido la Nochebuena y Navidad así como el cierre de año, entonces vaya a la 3 y 5 Norte, entre 14 y 12 Poniente. Ahí podrá encontrar los famosos chifladores, espantasuegras, cañones y palomas de diversos tamaños.
El carril confinado para el paso de bicicletas sirve como espacio para los puestos donde usted puede conseguir este tipo de mercancía.
Pese a estar prohibida su comercialización y supuestamente deben existir operativos para su retiro, estos productos están expuestos a la luz pública sin que se vendan de contrabando como podría suceder en mercados municipales o misceláneas.
Si usted desea algún instrumento para su propia seguridad o darle otro uso, entonces un puesto ambulante sobre la 12 Poniente puede ayudarle.
Se trata de la venta de instrumentos igualmente prohibidos como cuchillos, tubos o palos de fierro, equipos de descarga eléctrica y hasta pistolas de diábolos que simula ser una de verdad.
Durante el recorrido de El Sol de Puebla, los inspectores pasaban de largo sin hacer nada para quitar a los ambulantes o retirar la mercancía.
FRACASA CORREDOR
De acuerdo a versiones de los informales, el corredor comercial resulta poco funcional para sus niveles de venta por dos factores: el primero por estar ubicado en una zona lejos del paso constante de peatones y segundo, por la restricción de paso al transporte público.
La clientela es menor al quitar el transporte público, la gente no viene y por eso debemos ir a invadir las zonas prohibidas, es la propia necesidad lo que nos hace ir a estas calles”, expresó un grupo de ambulantes sin revelar sus nombres.
Otros señalaron que las bajas ventas por el sismo del pasado 19 de septiembre, hizo que tuvieran que torear solicitando al Ayuntamiento replantear el funcionamiento de este proyecto municipal.