Monday, 20 de May de 2024

Pluma Azul

Martes, 11 Agosto 2015 22:05
Rafael Micalco Méndez

Nací libre, me afilié al PAN libre y votaré libre con dignidad

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Cuando nos adherimos a Acción Nacional lo hicimos convencidos de la imperiosa necesidad y anhelo, como lo menciona Gómez Morin, de defender la dignidad de la persona humana, no solo aplicándola a nuestra persona sino a la de cada uno de las y los mexicanos.

Esta dignidad que es inherente a toda ser humano y a toda actividad humana, se vuelve la directriz de la existencia, por su puesto, en la vida política.

Es la dignidad, la que en el ejercicio político nos hace tener el mismo valor a cualquiera de nosotros, nos da y obliga a un trato igualitario reconociéndonos seres humanos e individuos miembros de una comunidad.

Acción Nacional surge como una respuesta de la sociedad que urgía el pleno ejercicio de su libertad en un momento de la historia de nuestro país donde los compatriotas eran humillados, burlados y sometidos al poder. Es por ello que reconociendo el valor de uno mismo, por el solo hecho de ser persona, nuestro partido se convierte en una esperanza, sólidamente argumentada y fundada para hacer reconocer esa dignidad.

Aníbal de Iturbide escribió: "Evidentemente no se fundó el PAN en contra del gobierno de don Lázaro Cárdenas, sino para instaurar en México un orden social justo, democrático y abundante para todos, fincado en el respecto a la dignidad de la persona humana, a sus prerrogativas esenciales, y a su participación equitativa en el bien común".

Podemos decir también que la dignidad, hace la diferencia entre el que es gobernado y el que es sometido por un gobierno. En el primer caso, el que es gobernado otorga el poder en comunidad para ser guiado mediante el gobierno que lo reconoce como democrático y justo. En el segundo caso, sin reconocer la dignidad el poder es utilizado para amenazar, condicionar y manipular al individuo a quien somete.

En congruencia, si Acción Nacional es la respuesta de esperanza de México, quienes militamos en este partido debemos reprobar el sometimiento y debemos estar dispuestos en todo momento a pagar el costo de caminar con la frente en alto.

Los momentos electorales y decisiones hacia dentro y fuera del partido son idóneos para poder probar con cuanta libertad nos conducimos. Estos procesos son "pruebas de fuego" para aquellos que teniendo la oportunidad, el poder y los recursos públicos puedan contener la tentación de utilizarlos en contra de sus correligionarios para inclinar la balanza hacia un lado. Y es prueba también, para aquellos que siendo parte de un equipo de trabajo, permitan que sobre ellos pese cualquier tipo de presión, amenaza o consigna.

Por ello, hoy le digo al panismo que en esta elección como en todas hay que votar con dignidad. Esa dignidad que nos pide y exige ser libres para liberar a México, porque: ¿Cómo podríamos pedirle al ciudadano no dejarse comprar el voto y votar libremente si en nuestra propia casa (el PAN) permitiéramos esas prácticas?

Debemos pensar qué respuesta daremos a la historia, cuando siendo la esperanza de que la democracia es posible, dejamos condicionar nuestro voto a cambio de una dádiva o recompensa. Sentando un antecedente terrible para las generaciones futuras y seguramente nuestros adversarios políticos utilizarán para desgastar nuestro prestigio.

En lo individual, los invito a reflexionar: ¿Qué escuela seremos en nuestro hogar para nuestros hijos y familia en general?, y para todos aquellos que en algún momento nos tomaron como ejemplo, ¿Si somos capaces de dejarnos vencer en la defensa de nuestros principios, solo por obtener una dádiva o ante el miedo?

No vale la pena dar la espalda a nuestros principios y valores, a las grandes ideas que mantuvieron a nuestro partido por más de siete décadas, debemos recordar que fue voluntad nuestra adherirnos al PAN, la mayoría de nosotros lo hicimos para encontrar la justicia que en otros lugares nos habían negado: la injusticia contra nuestra gente, abusos de los gobiernos, traición y falta de cumplimiento a los acuerdos, entre muchos otros actos que pisotean la dignidad. Todo esto que rechazamos nos hizo llegar al PAN, es momento de cerrar la puerta a esas prácticas para no volvernos esclavos de esa injusticia.

El futuro es esperanzador para todos aquellos que defendiendo la dignidad antepongamos el propósito de nuestra institución a su interés inmediato y particular. Recordar las palabras de Efraín González Luna, que decía: "Si una persona humana es equiparada a la materia, o degradada por otra o por muchas a la categoría de medio o instrumento, o esclavizada, u oprimida por la comunidad o por el Estado, es todo el mundo del espíritu el que sufre, es todo el orden de los valores humanos el atacado, es el camino de la salvación el que se cierra".

Dip. Rafael Micalco Méndez
Presidente Estatal PAN Puebla
micalco.presidente@panpuebla.org
@rafamicalco