Ay compadritos, tengo que ser bien honesto con ustedes.
Yo intento ser bien neto.
Ser así un broder… Alguien de ley. Neta.
Pues resulta que me estoy clavando con una morra que me late un chorro.
Es de esas gorditas agradecidas.
Esas que no son guapas, no son feas, pero pues le echan hartas ganas a la hora de matar el oso a puñaladas.
Le dicen La Adri.
Es re buena onda. Ella sí es una chica buena onda.
Sabe cocinar. Y bien sabroso.
Es de esas que se baña y se nota.
Huele sabroso también, como a pozole.
Vaya, hasta se ve que es de familia de alcurnia.
Me cae que no la merezco.
El único problema es que la muchacha tiene una doble vida.
Sí y no me refiero a que sea de esas muchachas que viven del sudor de su cuerpo.
Nel, a ellas todo mi respeto, pero mi chica no es de esas.
Mi chica me confesó apenitas.
Que es una de día y otra de noche.
De día es una ama de casa luchona.
Y de noche es…
Es…
Sextuitera…
Sí, la neta se prende subiendo sus cosas al Twitter.
Ay nanita.
Ya no sé qué hacer con ella.
Me recargo en la pared de los celos cada que sube cosas como esta:
No hay temor a Dios
La muchacha presume sus tangas.
Ya subió los videos de las escapadas que me doy de la Central de Abastos para verla.
No los voy a poner aquí porque esos sí me dan penita.
Aunque la neta hasta se nota que me luzco.
Bueno… pues resulta que yo la conocí por el Tuiter.
Sí, el del pajarito. El otro como Feisbú, pero aburrido.
Bueno pues yo no sabía que ahí se podía subir de todo. Y que hay hartas pieles enseñando de a gratis.
Un día me encontré con el perfil de La Adri.
Y me dejó sin palabras.
Se veía que ella hacía todo rico.
Y que le mando un mensajito.
Pues que nos ponemos a platicar en privado. Y que le invito una camita de pata para que no hubiera pierde.
Me la llevé a las cemas de La Fayuca, esas las sabrosas de hasta el fondo.
La plática nos llevó a límites insospechados, a conocer nuestro verdadero yo interior de nosotros.
Y pues me enamoré.
Cuando vimos que hasta a la hora de rechinar el catre éramos compatibles pues dije Diosito me mandó un ángel.
Pero ella siguió subiendo sus fotos, sus videos. ¡Sus tangas!
No pues… Le reclamé, le dije que TOOOOODO ESO que me comía, no podía verlo nadie más.
Y pues que me manda al diablo por celoso. Me dijo que ella no podía perder sus fologüers… O como se escriba.
Me cae que ni la Lyn May me prende tanto.
Y pues doblé las manitas.No puedo vivir sin ella.
Aunque tenga que aguantar que es… una sextuitera.