Pese a que en enero pasado Talavera Uriarte fue embargada y poco después se aclaró que todo había sido una confusión, este jueves 22 de febrero, la empresa dedicada a la fabricación de cerámica vidriada sufrió un nuevo decomiso. El encargado del lugar recalcó que se sigue tratando de un error pues “fue algo que pasó en los 90 y no tiene que ver con esta administración”.
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El embargo comenzó alrededor de las 08:00 horas, pero esta vez el Servicio de Administración Tributaria (SAT) acudió con apoyo de elementos de la Policía Estatal y Federal al inmueble ubicado sobre la calle 4 Poniente, número 911 entre la 9 y la 11 Sur del Centro de Puebla.
Hasta las 13:30 horas la calle seguía acordonada y resguardada por agentes viales para evitar que los automovilistas y peatones pasaran por la zona.
Fueron cuatro camionetas las que se utilizaron para trasladar los objetos. Personal del lugar denunció que algunos de ellos fueron “jaloneados”, sin embargo, al cuestionar a un elemento municipal, este aseguró que “todo fue tranquilo, el personal estaba muy pacífico”.
Michael Paulhus, uno de los gerentes del lugar, declaró lo mismo que en la ocasión anterior: el operativo respondía a un crédito fiscal ― mismo del que no se especificó el monto― adquirido por la anterior administración.
En el embargo del 30 de enero, esta misma persona apuntó que el problema era con otra empresa que se había dado la dirección de Talavera Uriarte, por lo que al siguiente día ya estaban trabajando de manera normal.
