Un exdiplomático de la Santa Sede fue condenado el sábado a cinco años de cárcel por posesión y distribución de pornografía infantil.
Monseñor Carlo Capella había reconocido que bajó pornografía infantil del internet durante lo que llamó un periodo de “fragilidad” y crisis personal debido a un traslado a la embajada del Vaticano en Washington.
En un alegato en que pidió clemencia, dijo que las 40 a 55 fotos, videos y animación japonesa hallados en su teléfono celular representaban simplemente un “tropiezo en el camino” de una vocación sacerdotal que amaba y en la que quería continuar
La pena ha sido ligeramente menor a la que solicitaba el promotor de justicia (fiscal) vaticano, Gian Piero Milano, quien había pedido cinco años y nueve meses y una sanción monetaria de 10 mil euros.
Capella, de 51 años, estaba bajo arresto en el Vaticano desde el pasado 7 de abril, después de que el 21 de agosto de 2017 llegara una notificación del Departamento estadunidense de Estado sobre la presunta comisión de ese delito.