Odio ese dicho que dice así: “Si camina como pato, grazna como pato y nada como pato... entonces es un pato”, y ustedes estimados lectores pensarán “y eso qué tiene que ver con la Navidad”. En realidad con la Navidad nada, pero con el PRI mucho.
Y es que a la dirigencia nacional del partido tricolor ya poco le importa que sus militantes en Puebla y los poblanos en general, nos demos cuenta que existe un pacto nuevamente con el morenovallismo para ceder la gubernatura, o de qué otra forma nos podemos explicar los repentinos cambios del Comité Ejecutivo Nacional para impulsar al líder estatal de ese partido, Jorge Estefan Chidiac.
Chidiac es el peor perfil del PRI para competir y no es que me caiga mal, simple y sencillamente me remito a la encuesta de la empresa MASDATA de Pepe Zenteno, la cual fue levantada en diciembre del 2017 y deja al diputado federal en tercer lugar de los priistas por debajo de Juan Carlos Lastiri y Enrique Doger. Chidiac tiene una intención del voto de 10 por ciento, el subsecretario de la Sedatu del 11 por ciento y el delegado del IMSS del 13 por ciento.
Chidiac sabe que está en desventaja y el precandidato presidencial del PRI, José Antonio Meade le pidió ser el abanderado del tricolor a la gubernatura en al menos 4 ocasiones, y en las 4 ocasiones se negó rotundamente, pero ni él ni nadie puede contra los designios de los todopoderosos priistas, por lo que irá al matadero sin oportunidad alguna, además se quedará sin la posición al Senado, la cual estaba seguro que podía ganar.
Y la evidencia de pacto queda al descubierto, porque Enrique Doger que es el aspirante más competitivo del PRI fue rasurado o está por ser rasurado, a pesar de que desde un mes antes ya había recibido distintos mensajes y hace unas semanas las muestras de apoyo se desbordaron en avalancha hacia su favor.
En fin, así es la política, así son los políticos y así es el PRI... ¡Dios nos agarre confesados!
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Me cuentan que la que sí anda con todo y poco le ha importado su anterior papel de opositora al morenovallismo, es mi antigua favorita Roxana Luna, pues resulta que Rox está aprovechando el vacío que dejaron Miguel Barbosa y Socorro Quezada para hacer su estructura al interior del PRD.
Ha pedido citas personales y en lo oscurito con cada uno de los perredistas que habían jurado amor a Barbosa y a Socorro Quezada y les ha prometido las perlas de la virgen. Desde respetar sus trabajos, darles todo lo que estos dos ex perredistas les habían prometido como candidaturas, cargos de elección popular, oficinas en el PRD y todo lo que nos podemos imaginar, siempre y cuando le juren lealtad.
Es decir, para preservar sus trabajos y aspirar a una candidatura le tienen que vender su alma a Rox o de lo contrario correrán con la misma suerte de sus ex amos y señores.
