¿Quién mató a Juany Maldonado?

Voy a ser bien honesto.

Hace años no se me complicaba tanto hablar de un tema.

El caso de Juany Maldonado y Erika Cázares duele porque son mis paisanas.

Por ser mujeres serranas, valientes, tenaces.

¿Quién no conoce a la familia de Juany Maldonado en Huauchinango?

Con Juany bromeábamos siempre porque mi padre ha sido un comprador compulsivo en la mueblería de su familia, “La Imperial”.

“Cabrona, les dejaba media quincena”, le decía. Ella se reía a carcajadas.

Juany Maldonado era una política experimentada, de tierra totalmente, que tocaba puertas y conocía bien la Sierra Norte.

Inicialmente, en esta campaña electoral, nadie daba un centavo por su candidatura. Pero en los últimos sondeos, su posición había remontado. Hay quienes aseguran que iba a ganar el distrito 2 de Huauchinango pues competía con puro yerro.

Se creía que la contienda por la diputación local de Huauchinango planteaba una batalla cerrada con el candidato antorchista del PRI, Fernando López Palacios y la candidata de la coalición Por Puebla al Frente, Liliana Luna Aguirre, esposa del alcalde Gabriel Alvarado.

Jorge Luis Fuentes Carranza, ex panista convertido a Morena, también se sumó a esta complicada elección, pero la ola de Andrés Manuel López Obrador en el distrito 2 no necesariamente lo estaba cobijando.

Para sorpresa de muchos, Juany estaba remontando, a un mes de las elecciones su candidatura por el Distrito 2 se volvía sólida. Se encontraba seis puntos arriba del candidato de Morena.

Juany era una mujer querida, combativa, entrona. Muy buena política.

¿Pero a qué grupo le convenía quitarla de su camino?

En Santa Clara Ocoyucan hubo señalamientos directos en contra de Antorcha Campesina, cuando fue asesinado el candidato de Morena, Aarón Varela, quien también era de los preferidos.

En su velorio, su féretro fue incluso dejado unos momentos ante la presidencia municipal que aún mantiene el grupo Antorchista. “¡Fue Antorcha, fue Antorcha!”, gritaron sus amigos y familiares.

En esta ocasión, por el Distrito 2 de Huauchinango compite también por el PRI un candidato antorchista, Fernando López Palacios.

¿Le convendría a la organización quitar del camino a Juany Maldonado?

Porque Antorcha Campesina tiene presencia en Huauchinango en la comunidad de Puga, de donde son originarios la mayoría de los detenidos tras la balacera con los policías federales en la carretera México-Tuxpan, y que hasta el momento son los principales sospechosos del doble feminicidio.

El viernes la mataron.

El sábado que me enteré, muy de mañana. No quería creerlo.

Tuve que hacer un par de llamadas a paisanos en la Sierra Norte que me lo confirmaron.

Estaba mudo. Y desde entonces me pregunto lo mismo:

¿A quién le convendría la muerte de Juany Maldonado?

¿O hay acaso una vertiente por el lado de Erika Cázares?

Pero también, porqué estas preguntas no se las está haciendo la autoridad.

¿Dónde está el fiscal Víctor Carrancá?

¿Y por qué no ha dado la cara justo cuando se da la campaña electoral más sangrienta en décadas?

¿Cuánto más va a tardar la gente de Carrancá en dar una investigación sólida?

A todos los que nos duele Juany, a los que nos duele Erika, a los que nos dueles tantos casos sin resolver, tanta violencia, tanta sangre derramada, nos es imprescindible la justicia.

De qué ser sirve tener autoridades si no alivian mínimamente el dolor de los deudos con un poco de certeza.

A las familias de Juany y Erika les es imprescindible saber quién está detrás de su muerte.

Quisiera que Carrancá viera a los ojos de Juan Pablo, el hijo de Juany, de 17 años.

Quisiera que viera a los ojos a doña Vita, su mamá.

Y pudiera decirles que no está haciendo bien su trabajo. Que no puede darles certeza, que no puede dar un mínimo ápice de justicia.

Así como quisiera que lo dijera a todas las familias de las poblanas asesinadas.

Pido imposibles porque parece que Carrancá nunca lo hará.

Carrancá no está dando respuestas.

¿Quién las va a dar?

¿Quién nos va a decir quién mató a Juany Maldonado y Erika Cázares?