Wednesday, 24 de April de 2024

Vida y Estilo

Conoce la guía nutricional para emergencias propuesta por la UAM

- Foto: Especial

Más allá del valor nutritivo, la comida genera referentes emocionales, pues es uno de los primeros contactos con el mundo exterior

Por Excélsior /

Un el objetivo de mejorar la distribución y organización de víveres en los centros de acopio y albergues establecidos tras el sismo del 19 de septiembre pasado, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) desarrolla un protocolo alimentario para situaciones de emergencia.

La asesoría nutricional especializada que ofrecerá esa casa de estudios será a través del Departamento de Atención a la Salud de la Unidad Xochimilco.

El conjunto de reglas a seguir por la sociedad civil en casos de desastres naturales, se formuló con base en la evaluación de los mecanismos empleados para concentrar, distribuir e incluso preparar alimentos durante la contingencia posterior al sismo, explicó la investigadora Miriam Bertran Vilà.

Agregó que el documento plantea cómo instalar y organizar los albergues junto con una guía nutricional culturalmente adecuada, pues “así como se ha educado en cuanto a seguir las medidas de seguridad en casos de sismos, incendios y otras catástrofes, es necesaria una instrucción educativa en ese tema para situaciones de emergencia”.

La especialista refirió que durante los días posteriores al sismo se detectó una abundancia de comida preparada, así como de arroz, frijoles y pastas, productos con altos volúmenes de carbohidratos y carbonos simples, pero escasez de verduras, frutas, carnes, huevos, quesos y artículos frescos en general.

La profesora del área de Educación y Salud de la UAM indicó que "más allá del valor nutritivo, la comida genera referentes emocionales, pues es uno de los primeros contactos con el mundo exterior desde el nacimiento que genera referentes de espacio, ocasión y familia, que evocan recuerdos buenos, sensaciones agradables o desagradables”.

Por ello, señaló, por lo que en los albergues es importante impulsar la participación social para reencontrarse con esos recuerdos gratos.

La solidaridad del pueblo mexicano ha sido ejemplar, se ha volcado en ayudar, pero sin un orden en gran número de centros de acopio ni una lista básica de alimentos puede generarse desperdicio o falta de comestibles”, puntualizó la experta.

Excélsior