La lista de 80 municipios de alta prioridad que se fijó el Revolucionario Institucional para ganar en las elecciones de 2018, se redujo a 21 y los priistas enfocarán todas sus baterías para ganarlos a como dé lugar, pues según sus estimaciones, con ellos podrían asegurar el triunfo para el Presidente de la República y la gubernatura.
La semana pasada el dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza estuvo en la ciudad de Puebla para sostener una reunión con 200 priistas incluidos alcaldes, dirigentes municipales, diputados locales, federales y las senadoras con el objetivo de definir la estrategia político-electoral que seguirán rumbo al proceso electoral del próximo año. En esa reunión establecieron una lista de 80 municipios prioritarios para el tricolor.
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Sin embargo, la lista se redujo a 21 entre los que destacan las cabeceras distritales de las demarcaciones federales, las cuales en dicho encuentro coincidieron que eran de vital importancia ganar, pues las votaciones que obtengan en estos municipios por su densidad poblacional, ayudará a equilibrar las derrotas que sufra ese partido en otros lugares.
De estos solo ocho son gobernados por el PRI: Xicotepec de Juárez, Chignahuapan, Tepeaca, Acatzingo, Quecholac, Tehuacán, Huejotzingo y Ajalpan.
Mientras que los 13 restantes son gobernador por PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y el PT que se unieron en 2013 a través de la coalición Puebla Unida: Huauchinango, Zacatlán, Tlatlauquitepec, Zacapoaxtla, Ciudad Serdán, Tecamachalco, San Pedro Cholula, San Andrés Cholula, Atlixco, Izúcar de Matamoros, San Martín Texmelucan y Acatlán de Osorio.
De acuerdo con la estrategia del tricolor, se postularán los mejores perfiles que puedan garantizar el triunfo más allá de sus padrinazgos o cuotas de poder para los grupos políticos, debido a que ahora serán los candidatos a las alcaldías y a las diputaciones federales y locales quienes “jalen” los votos para el candidato a Los Pinos, debido a la pésima imagen que tiene Enrique Peña Nieto.