Juan Ignacio Alvarado Martínez, el asesino confeso del rector de la Universidad Angelópolis, Roberto Corvera Guzmán, será imputado por el delito de homicidio. Mientras tanto la familia de Corvera analizará también quién asumirá el cargo de rector de la institución educativa.
Fuentes de Fiscalía General del Estado informaron a PÁGINA NEGRA que este lunes se vence el plazo para la calificación de la detención de Juan Ignacio Alvarado.
Una vez que el juez de control determine la legal detención Juan Ignacio Alvarado, se dictará el auto de formal vinculación por el delito de homicidio y se prevé que con esto se imponga la prisión preventiva oficiosa e ingrese al penal de San Miguel.
De acuerdo a amigos de la familia Corvera, la Universidad Angelópolis en breve tendrá un nuevo rector por lo que el consejo directivo se reunirá a más tardar esta semana para definir quién será el sucesor de Roberto Corvera como titular de la institución.
Una venganza
Juan Ignacio Alvarado Martínez, el asesino del rector de la Universidad Angelópolis, decidió cobrar venganza luego de 28 años de perder su cédula profesional de pedagogo y terminar trabajando de chofer en el transporte público.
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El pasado viernes 4 de agosto, llegó a las instalaciones de la universidad y se dirigió directamente a la oficina del rector Roberto Corvera Guzmán para dispararle en tres ocasiones y privarlo de la vida.
El asesino fue perseguido y detenido por elementos de la Policía Municipal en inmediaciones del mercado de la Acocota. Al momento de ser puesto a disposición de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla aceptó ser el homicida de Corvera Guzmán y confesó que lo hizo por venganza.
De pedagogo a chofer
Fue en 1989, cuando Roberto Corvera Guzmán se desempeñaba como supervisor de maestros en el estado de Chiapas y ordenó una investigación contra el profesor Juan Ignacio Alvarado Martínez. Esto provocó que se le retirara su cédula profesional y ya no pudiera desempeñarse como mesttro, situación que llevó al pedagogo a buscar trabajo en otras instancias, terminando de chofer de la ruta 21 del transporte público en Puebla.
Hace un mes, Juan Ignacio Alvarado pudo ubicar a Roberto Corvera y supo que se desempeñaba como rector de la universidad en la capital poblana. Desde ese momento, lo estuvo vigilando para planear su venganza y fue la tarde del pasado viernes 4 de agosto, cuando decidió acudir a la escuela, entrar a la oficina del rector y dispararle en dos ocasiones en la cabeza, provocándole la muerte instantánea.