Luego de que casas de seis clústers de Lomas de Angelópolis quedaron bajo el agua, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) llevó a cabo un recorrido en la zona y detectó que hay bardas del desarrollo inmobiliario de Grupo Proyecta que bloquean la afluente del Río Atoyac y el arroyo Almoloya, cuando la ley prohíbe construcciones a menos de diez metros.
Así lo reveló el delegado de la dependencia federal, Alberto Jiménez Merino quien declaró que después de una revisión exhaustiva encontró que no existe un solo permiso emitido por la Conagua para que Grupo Proyecta realizara alguna obra en zona federal.
Dijo que a lo largo de la semana los inspectores estarán trabajando en el lujoso fraccionamiento para determinar exactamente cuántas casas y bardas están en zonas federales ilegalmente y entonces proceder a la demolición.
Nosotros no otorgamos licencias en ninguna parte del fraccionamiento, no es nuestra facultad, es facultad del Ayuntamiento, pero sí debemos vigilar que se cumpla la ley en cuanto a respetar zonas federales (...) Hicimos una revisión y encontramos que hay bardas que obstruyen la circulación del agua y por eso se inundaron, tenemos que proceder a retirarlas”.
Jiménez Merino dijo que es responsabilidad de los Ayuntamientos expedir la licencia de construcción del desarrollo inmobiliario, que no debieron acudir a la Conagua pero que también era su obligación respetar la restricción para levantar edificaciones en la orilla de cualquier río.
En la entrevista, el delegado de la Conagua dijo que las inundaciones del pasado 30 de junio fueron provocadas por que hay partes en donde las edificaciones de Grupo Proyecta obstruyen la afluente del río y también porque esa noche cayó una lluvia atípica.
Sobre la obra que realizó “El Delirio” para entubar la afluente del arroyo Almoloya, Jiménez Merino dijo que esta es la única que cuenta con permisos para su edificación.
Fue la madrugada del viernes 30 de junio cuando las intensas lluvias ocasionaron que las viviendas de los clústers Sonora, Castellana, Nilo, Victoria, 222 y Cairo, se inundaran completamente. El nivel del agua fue tal que dañó vehículos, recámaras, así como ropa y electrodomésticos.
Además, la corriente tiró un total de 14 bardas de contención lo que ocasionó que se metiera un alud de aguas negras y lodo que puso en riesgo la vida de los residentes.
CENTRAL hizo un recorrido por Lomas de Angelópolis, en específico por los clústers afectados y se pudo constatar que algunos como Lisboa están construidos sobre el cauce del río Atoyac, mientras que otros como el Nilo, el Cairo, Sonora, por mencionar algunos, fueron edificados a las orillas del afluente, sin respetar los límites considerados como zonas federales que estipulan las leyes antes mencionadas.
Y es que la fracción 47, del Artículo 3 de la Ley Nacional de Aguas, establece que las zonas federales aledañas a los ríos deben tener 10 metros de anchura. A la letra dicha fracción dice:
Ribera o Zona Federal: Las fajas de diez metros de anchura contiguas al cauce de las corrientes o al vaso de los depósitos de propiedad nacional, medidas horizontalmente a partir del nivel de aguas máximas ordinarias. La amplitud de la ribera o zona federal será de cinco metros en los cauces con una anchura no mayor de cinco metros (...)”.
Además, la fracción 9 del artículo 7, de la Ley de Bienes Nacionales contempla las riberas de los ríos como parte de estos bienes, por lo que no se puede construir sobre las franjas de tierra, ni se pueden ocupar.