Agradezco a mis Pugfans tantas muestras de cariño, sus cartas y mails para seguir denunciando a esas personas feas que cometen corrupción, que meten la pata o hacen cosas que van en contra la moral.
Pero esta triste historia me causó tanto temor como las lluvias que se han desatado en los últimos días en nuestra Puebla de los Perros. Cada vez que mis orejitas captan los rayos a lo lejos, aullo, chillo y ladro, y estas mismas emociones me provoca la corrupción de mi ex ídola Caro Gil.
Guauuu, guauuuuuuu, guauuuuuuuuuuuu.
Me da tanta pena decirlo, pero ya vimos que los ídolos de la tele tienen mucha cola que les pisen y esta muchachita no es la excepción. Yo por eso, nunca quise aparecer en un episodio de El encantador de perros, El jefe y sus pitbulls, Alerta canina, u otros. Imagínense, de haber salido en esos programas, ahorita ya estaría cobrando en Harvard, Oxford, en la Panamericana o de a perdida en la UDLA.
Y a mi adorada Caro Gil por dar el clima en el canal 3 de Televisa Puebla, sólo le alcanzó para cobrar en la Universidad Tecnológica de Puebla, y miren que cobra muy bien como jefa del Departamento de Acividades Paraescolares, pues gana 27 mil 496 pesos.
Aaaaaag, aaaaaaag, aaaaaaaaagg (es mi jadeo de calor)
Pero eso no es todo, Caro Gil resultó ser una abusiva, abusadora, pues también le consiguió chamba a sus muy mejores amigas Evelyn Hurtado Morales y Adiana Contreras Tejeda. La primera de ellas fue nombrada jefa del Departamento de Deportes y Eventos Culturales.
Y a Adriana Contretas Tejeda la colocó como en la eficiente labor a cargo de la Dirección General Administrativa de quien fuera uno de los fundadores de la UTP, Tomás Silva. E impuso a María Pía García Pandal en el Departamento de Relaciones Públicas y Eventos Especiales.
Guauuu, guauuuuuu, guauuuuuuuuuuu.
Miren que ni yo me he atrevido a pedirle trabajo a mi adorado Tony Gali para Lassie, Colmillo blanco, Yashiro, o mi amante Pulgoso —el perro de Marimar— y eso que somos de pocas pulgas y mucho glamour.
Pero esta terrible historia no termina aquí. Caro Gil adjudica por licitación directa productos audiovisuales a su cuñado de nombre Edgar Quiñones quien tiene una empresa de video y fotografía.
Guauuuu, guauuuuu, guauuuuuuuu.
Ggggggggrrrr (otra vez me enojé y ahora la quiero morder).
Pero me queda claro que estas prácticas, seguramente las aprendió de Mari Loli Pellón.
Hasta la próxima mis Pugfans y recuerden siempre enseñen los dientes pero no las mañas.
