¡Alabado sea el señor!
¡Cristo redentor!
Ante un mundo cruel y desolado, empezaba a creer que la justicia no existe, que el karma no existe, y que los malos siempre salen ganando.
Pero este fin de semana comprobé que tarde o temprano todos reciben su merecido, que el karma y la vida siempre se cobra las malas acciones, pero además con una “cucharada de tu propia sopa” o como se diga.
Bien dicen por ahí que “El que las hace no las consciente”.
Y eso le pasó a Moreno Valle. Acostumbrado siempre a ganar, a salirse con la suya y a pasar por encima de los demás, que no soportó que Ricardo Anaya le haya ganado la partida para ser el candidato a la Presidencia de la República.
Ahora, @RafaExGobernador anda que no lo calienta ni el sol, y por más que intenta curarse en salud, la realidad es que por fin perdió una batalla, ni siquiera tuvo la oportunidad de llegar a la boleta y se cae su discurso de que nunca pierde o ha perdido.
En esta ocasión le tocó perder con un político de su mismo nivel, situación que muchos poblanos están festejando y que deja mal parados a sus rafaliebers, quienes igual han de estar dando excusas y pretextos por todos lados para justificar la derrota de su “Amo y señor”.
Y es que recordarán que luego de que Moreno Valle se destapó a nivel nacional para buscar la Presidencia de la República y como Margarita Zavala era la más fuerte en el PAN, inició una campaña en redes sociales a la que los burócratas y panistas se sumaron, en la que difundían mensajes de que él sí tenía experiencia.
¡Ridículos!
Más ridículo Moreno Valle que acostumbrado a ganarlas todas, esta vez no pudo con el coraje y la vergüenza, por lo que está consumando su venganza contra Ricardo Anaya. Su primer “golpe” fue no asistir al registro del queretano como precandidato del PAN y prohibir a los panistas poblanos acudir.
¡Uy qué venganza!
Pero resultó peor para Moreno Valle y los panistas poblanos, pues quedaron en mal ante sus correligionarios y ante los medios nacionales. Además, con su ausencia corroboraron las versiones que se habían dado desde hace semanas, en el sentido de que traicionarían al PAN y a Anaya, ahora ya no les queda la menor duda sobre las jugarretas del morenovallismo, su plan secreto y clandestino apenas y duró escondido unos días.
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Otra cosa que llama la atención, fue la ausencia de Lalo Rivera en el registro de Ricardo Anaya.
Se supone que el ex alcalde capitalino tenía que ser uno de los poblanos más felices por la postulación del queretano y debía estar en primera fila aplaudiendo, luego de ser víctima de la represión y un perseguido político del morenovallismo.
¿Será que ya pactó con Moreno Valle?