La reciente declaración de Luis Miguel Barbosa sobre que de nuevo quiere que lo tomen en cuenta como candidato a la gubernatura por MORENA, no es más que su estrategia para que no se olviden de él en la asignación de posiciones al 2018.
Y es que ya está más que decidido por la dirigencia nacional que la próxima semana se anunciará por fin a Enrique Cárdenas como Coordinador de Organización Estatal de MORENA.
Barbosa no es el único que está levantando su manita para que no se olviden de él, el domingo Alejandro Armenta estuvo en Tehuacán, donde según él reunió a mil morenistas.
Barbosa y Armenta solo buscan que Andrés Manuel López Obrador no los olvide a la hora de designar candidaturas.
La declaración de Barbosa llamó la atención pues hace solo unas semanas declinó a favor de Cárdenas y hasta dijo que con él, MORENA tenía la posibilidad de ganar el gobierno de Puebla.
Ahora queda como bipolar, pero logró que lo volteen a ver por si necesitan negociar su apoyo.
En privado, Barbosa cree literal que Cárdenas es un “pendejo”.
Así lo escucharon muchos reporteros decirle luego de que terminó la rueda de prensa en el restaurante “La Mexicana”.
El senador se sentó en otra mesa para desayunar con su esposa y su equipo de colaboradores y ahí habló en voz alta sin pensar que muchos de los que estaban cerca podrían escucharlo.
Dijo, literal, que Cárdenas era un “pendejo” y que su perfil no le alcanzaba para ganar la gubernatura de Puebla.
Repitió que si no hubiera sido porque él se retiró de la contienda, el académico nunca hubiera logrado subir en las encuestas.
También habló mal de Armenta, dijo que el expriista ni siquiera es contemplado por AMLO para la coordinación y que fue solo gracias a Yedickol Polevnsky que lo midieron en la encuesta.
La que no han podido resolver es quién será su candidata a la alcaldía de Puebla, pues dicen que Amy Camacho ya les dijo definitivamente no está interesada en el cargo y no encuentran otro perfil que sea capaz de ganar la capital.