El historial de extorsión y moches del empleado de segundo nivel en Gobernación Municipal, Aldo Francisco Burelo Cacho es bastante amplio. Mientras fungió como mano derecha de Mario Rincón en la Secretaría de Desarrollo Rural Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial cobró por entregar información sobre las obras cercanas a la armadora Audi y usando su cargo de asesor de Leoncio Paisano en San Andrés Cholula pidió un millón de pesos a constructores para que evadieran la cesión de áreas verdes al Ayuntamiento.
Ayer, CENTRAL informó que Burelo Cacho cobra en el Ayuntamiento de San Andrés Cholula como asesor de Leoncio Paisano y mantiene un puesto como funcionario de segundo nivel con Juan Carlos Morales Páez en la Secretaría de Gobernación Municipal de Puebla, donde actualmente es edil Luis Banck Serrato.
Documentos entregados a este periódico digital revelan que Burelo, cercano al panista Mario Rincón, cobra 61 mil pesos entre sus dos empleos, pero además lo acusan por cobrar “moches” a proveedores para poder trabajar con al Ayuntamiento de Puebla.
El periodista Alejandro Mondragón publicó en su columna Al Portador, el 25 de agosto del 2014, uno de los primeros antecedentes de Burelo en la mafia que operaba con la venia de Mario Rincón en la Secretaría de Desarrollo Rural Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial.
Según la publicación Aldo Francisco Burelo Cacho, coordinador de asesores de Mario Rincón cobraba por entregar la información de obras cercanas a Audi, en la zona de la Vía Atlixcáyotl y en proyectos del Centro Histórico de Puebla.
Por entregar información privilegiada de estas zonas exigía hasta 450 mil pesos mientras que, por asesoría en materia legal y elaboración de documentos para que él mismo la aprobara como asesor de Mario Rincón, exigía al menos 250 mil pesos. Burelo también pedía 35 mil pesos por gestionar una reunión con Yamel Lizet Mota Corro, la entonces directora del Parque Flor del Bosque.
El 22 de julio del 2015, Aldo Francisco Burelo Cacho, nuevamente fue noticia y el periodista Valentín Varillas publicó en su columna “La Tempestad” que ahora, como asesor de Leoncio Paisano, proponía esquemas de “mutua colaboración para que los constructores no tuvieran ningún problema con el finiquito de sus respectivas obras”.
Según la publicación, para aquellos que construían fraccionamientos en San Andrés, proponía que el porcentaje de áreas verdes que obliga la ley a otorgar para la comuna, disminuyera de 20 a un 5 por ciento del lote, esto a cambio de un millón de pesos en efectivo. Burelo exigía además el pago de otro millón al momento de entregar la licencia de terminación de obra y el dictamen de áreas de donación.
Por si fuera poco, Burelo amenazaba a los empresarios inmobiliarios que no estuvieran de acuerdo con el trato y les aseguraba que la administración de Leoncio Paisano los vetaría, les clausuraría sus obras o hasta les retiraría los permisos de construcción.