El ganadero Jesús Vargas Pérez fue ejecutado por cuatro pistoleros en el municipio de Emiliano Zapata, a unos 150 kilómetros de esta capital.
En noviembre del año pasado había sufrido otro atentado, sobrevivió pero murió su hijo de ocho años y resultó herida una hija de 10 años.
De acuerdo con reportes de la policía local, Vargas Pérez, de 49 años, fue acribillado alrededor de las once de la mañana de hoy en la colonia El Piedral de Emiliano Zapata, tras haber salido de su domicilio.
Según testigos, cuatro pistoleros abrieron fuego a la camioneta Porsche negra en la que se trasportaba y finalmente le dieron el tiro de gracia. El vehículo presentaba al menos 19 impactos de bala.
Los sicarios huyeron con rumbo al municipio de Balancán, donde Vargas Pérez había sido atacado en noviembre del año pasado con su familia.
En esa fecha, el ganadero viajaba en una camioneta Hummer junto con sus hijos menores cuando un comando le disparó a la altura de la comunidad Plan de Guadalupe, sobre la carretera Balancán-Villa El Triunfo.
Vargas Pérez y su hija resultaron heridos, pero su hijo murió al recibir tres balazos.
En su declaración ante el Ministerio Público, el ganadero dijo que regresaba con sus dos hijos luego de asistir a la celebración del Día de Muertos en Chumpán, Campeche, cuando alrededor de las 23:30 horas se le emparejó una camioneta gris y sus ocupantes le dispararon cinco veces.
Los criminales huyeron y él, herido en el brazo izquierdo, pudo buscar ayuda en un rancho cercano a un kilómetro del lugar del atentado.
El ranchero Jesús Vargas Pérez ya no tuvo suerte y hoy fue asesinado.