Dios en el Poder

Después de un mes y medio de errores absurdos de los voceros; de divertidas ocurrencias de Facundo Rosas; de piedras de gran calibre de Luis Maldonado; de trastadas del procurador Víctor Carrancá; de la bipolaridad Chalchihuanesca de Rafael Moreno Valle y de la madriza descomunal en la prensa nacional y en la local, al fin el gobierno morenovallista tuvo una idea para contrarrestar la crisis y para dejar en claro de una vez por todas que a Rafael Moreno Valle sí le creen los periodistas.

La solución al tremendo aprieto en el que está el gobierno morenovallista —por un cohetón sin credibilidad y un proyectil de punta de goma con contundencia mortal— llegó cual aparición divina a la vida de Luis Maldonado en una noche de locas, una noche copa.

Le iluminó el rostro.
La estela divina alcanzó el trago también.
Y los limones.
Y hasta al mariachi.
El arrobo alcanzó para todos los reunidos en Casa Aguayo aquella madrugada.  

La estrategia para redimirse de las piedras de gran calibre había llegado al fin: formar el Verdadero Ejército Periodístico de Rafael Moreno Valle para confrontar con la verdad, con los hechos, con cohetones, con ondas expansivas y —faltaba más— con piedras de gran calibre los dichos de Katia d’Artigues,Raymundo Riva Palacio, Carmen Aristegui, Lydia Cacho, Jorge Zepeda, Ricardo Raphael, Alejandro Páez Varela, Carlos Loret de Mola, Álvaro Delgado, Jenaro Villamil, Alberto Aguirre, Francisco Garfias, Martín Moreno, Darío Ramírez, Carlos Puig, Ciro Gómez Leyva, Federico Berrueto, Mayté Azuela y Roberto Rock, entre otros poco célebres.

Uff.

El único problema de la estrategia maldonadista para sortear la crisis de Chalchiahuapan era encontrar a los Periodistas Libres e Independientes veraces, influyentes, prestigiosos y trascendentes de México —no de la aldea poblana— para conformar el Verdadero Ejército Periodístico de Moreno Valle.

Titánica labor la de Luis Maldonado.

¿Dónde encontrar a estos periodistas comprometidos con la verdad y crédulos de ondas expansivas?

¿Dónde se esconden estos heraldos dispuestos a defender al cohetón con su propia vida?

“¡¿Dónde?!”, gritó desesperado Luis Maldonado a los dioses viejos y a los dioses nuevos, a los siete cielos y a los siete infiernos “¡¿Dónde?!”.

Ya en la cruda, en fondo de la resaca, encontró la respuesta. —Y lo peor es que Moreno Valle se la compró #plop—

**

Luis Maldonado recordó a aquellos que en dos ocasiones le han dado el Premio Nacional de Periodismo.

Que tanta fama le ha dado.

Y sin hacer tanta memoria, llegó a su cabeza aquel momento en que “el imponente Museo Nacional de Antropología, en el milenario Bosque de Chapultepec, abrió sus puertas a las libertades de prensa y de expresión con los acordes de la música virtuosa de Pergolesi, Vivaldi, Tchaikovsky y Moncayo”[1] (sic).

Y al rememorar semejante momento en que las “libertades de prensa y expresión”[2] entraron al imponente Museo Nacional de Antropología, supo que la salvación morenovallista había estado siempre en la inigualable, inconfundible, apoteósica, cómica, mágica, musical Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos A. C. (Fapermex)

Señor, sí señor.

Ni más ni menos.

Faltaba más.

Pues, claro si en la Fapermex todos son Licenciados en Periodismo —No como los disque periodistas nacionales y locales iletrados, sin licenciaturas— y además, son los Comunicadores Más Importantes de México (recontra sic) y tiene de presidente del Colegio de Licenciados en Periodismo al Licenciado en Periodismo Don Iván Mercado —Ni siquiera sé qué decir—.

Tal vez usted recuerde al prestigioso columnista Licenciado en Periodismo Don Teodoro Rentería, excelso prosista que cada semana nos deleita con sus letras en… en… en… en… ejem… ejem… un momento estoy gogleando… en… en… ejem… Bueno, que cada semana nos empapa con su sabiduría en las prestigiosas páginas de… de… de… —Tal vez Luis Maldonado nos pueda informar dónde escribe este virtuoso del periodismo para no quedarnos con la maldita duda que me carcomerá todas las noches venideras—.

Tal vez usted sí que recuerde el escándalo desatado por el Licenciado en Periodismo Don Roberto Piñón… ese que todo México leyó en… en… este… ahí… en… Mmm…

Qué me dicen del caso descubierto por el Licenciado en Periodismo Don Miguel Ángel Díaz… ¿Eh? Gran caso que cimbró al país aquella mañana que salió publicado en… en… en… este… íjoles…

Quizá recuerden ese texto célebre del Licenciado en Periodismo Don José Prisco, ese del gran tema, que a todo México conmovió… ese que el mundo entero conoció en las páginas de… este… ujum… chanfle…

O si quierales suene el nombre de la Licenciada en Periodismo Doña Hilda Luis Valdemar… Bueno a ella sí la conozco pero por su cabello… nada más.

Ah pero eso sí, todos conocemos al Licenciado en Periodismo Don Óscar Alvizo por su reportaje que sacudió al sistema político en México con… este… sí… claro… que escuchamos en… no, espérense, que leímos… madres…

 ¿El Licenciado en Periodismo Don Fernando Irala les dice algo? ¿Licenciado en Periodismo Don Raúl Gómez?

Wtf.

Eso sí, todos muy Licenciados en Periodismo y muy Galardonados por Rafael Moreno Valle y muy reclutados por Luis Maldonado pero nomás no doy quiénes son. —Maldita mi ignorancia y la del google que no los encontró—.

Los prestigiosos periodistas reclutados por el morenovallismo celebraron la libertad de prensa y de expresión que se vive en Puebla y agradecieron como sólo ellos saben hacerlo: con “una lluvia de aplausos”[3] y gritos al unísono de “¡unidad!”, “¡unidad!”, “¡unidad!”[4] la hospitalidad que proporcionó el gobierno del Licenciado Don Rafael Moreno Valle, él siempre tan comprometido con la Prensa Libre e Independiente de México.

Chingá.

Para la conformación del Verdadero y Único Ejército Periodístico de Moreno Valle, el gobierno se vio en la penosa necesidad —dice el buen Enrique Núñez— de pagar el hospedaje, la comida, la organización, la bebiday hasta los premios del XII Congreso Nacional y de la IX Asamblea Nacional Ordinaria de la Fapermex.

La ventaja es que los Grandes Columnistas de Puebla —Ricardo Morales, Fabián Gómez, Roberto Desachy, Miguel Ángel Cordero y otros—  que han defendido al Góber Bala y sus teorías progresistas ya no están solos.

Ya no serán los columnistas contra el mundo que se burla de la versión morenovallista.

Ya no serán los cinco/seis locos en el tren del morenovallismo.

Ahora serán esos Cinco/Seis con todo un ejército periodístico —que sí está a su nivel— dispuesto a defender al Góber Bala.

Yuju.

Qué cofradía: Rentería-Gómez-Desachy-Valdemar-Cordero-Morales-Irala…  

Así es Luis Maldonado:
Dale unos tragos y te dará unas piedras de gran calibre.
Dale más tragos y te dará una estrategia.
Dale unos pesitos y te dará un cohetón con ondas expansivas.
Dale más pesitos y te dará un Ejército…

Miau.